En la entrada anterior publiqué un resumen del artículo de Sergio de Régules con el mismo nombre, el cual pueden encontrar en este link (recomiendo mucho que lo lean):
http://www.comoves.unam.mx/numeros/articulo/58/el-lado-oscuro-del-universo
Este pequeño comic es parte de la actividad 2 del curso propedéutico que estoy llevando, y trata sobre este artículo científico. Espero que les guste.
Vengo con otra actividad de mi curso propedéutico de la UnADM, y esta vez me dejaron leer un texto científico de mi elección. He elegido este, pues los temas sobre astronomía me parecen interesantes, y no es para menos. Dejo el resumen y, al final, el link para que lean el artículo original y completo.
El texto nos habla sobre la importancia que tiene la luz para determinar lo lejos que un objeto se encuentra de nosotros. Sabemos que una luz lejana brilla menos que una luz que está más cerca, pero ¿qué pasa con las estrellas, por ejemplo? Por estudios científicos sabemos que las estrellas se encuentran a miles de años luz de distancia, pero si no supiéramos esto, podríamos inferir que un objeto luminoso que brilla débilmente a unos metros de nosotros está más lejos que una estrella que brilla con más fuerza. Entonces la intensidad de la luz ya no es un indicador tan confiable de distancias, ¿o si? Pues resulta que en realidad, los científicos utilizan una técnica que usa el brillo de la luz para determinar la lejanía de las estrellas y sus galaxias, y a esta técnica se le conoce como “corrimiento al rojo”.
A partir de esta técnica se han hecho importantes descubrimientos en la astronomía. Antes del siglo XX se creía que el universo era estático, que las estrellas, galaxias, nebulosas y demás estaban siempre en un solo lugar, pero eso cambió cuando en 1929, Edwin Hubble determinó (por medio del corrimiento al rojo) que en realidad las galaxias estaban en movimiento, y se estaban alejando unas de otras, indicando que el universo se encontraba en expansión (de aquí nace la ley de Hubble). Su hallazgo dio pie más adelante a la formulación de la teoría del Big Bang que se ha ido ajustando con los años. A principios de los 80 los cosmólogos añadieron la hipótesis de la “inflación” que supone que “en la primera fracción de segundo una fuerza de repulsión muy intensa hizo que el embrión de Universo pasara de un tamaño menor que el de un átomo al de una toronja en un tiempo brevísimo.”
Pero para que esta hipótesis tuviera sustento, el universo debiera ser necesariamente plano para satisfacerlo, y con “plano” se refiere a que, si por ejemplo extendemos una línea recta hasta el infinito, dicha línea no se va a curvar en ningún momento. Existían, de hecho, tres posibilidades:
Si tuviera una cantidad balanceada o menor, daría condiciones de que el universo continuara expandiéndose, pero si la materia fuera mucha, entonces llegaría el punto en el que la expansión se detuviera por la fuerza de gravedad, “como una piedra que se lanza hacia arriba y que empieza a bajar al llegar a cierta altura.” El problema era que los hallazgos que se habían hecho hasta el momento apuntaban a que al universo le faltaba materia para ser plano, lo que significaba que la hipótesis de inflación no era sustentable.
En 1998, el telescopio Keck II descubrió una supernova que “acababa” de hacer explosión. Los científicos del Proyecto de Cosmología con Supernovas usaron el telescopio Hubble días después del hallazgo para determinar la lejanía de la supernova usando la técnica del corrimiento en rojo. Tras varios cálculos, determinaron que esta había explotado miles de millones de años atrás. Hacia este año, el equipo ya había estudiado 40 supernovas, y de todos los estudios que habían hecho determinaron que había una irregularidad, pues determinaron que las galaxias se estaban alejando más de lo que se esperaba teniendo la suposición de que el universo se estaba desacelerando por la gravedad, lo que quería decir que en realidad, la expansión del universo estaba aumentando su velocidad gradualmente.
En realidad el significado de esto es que hay una fuerza gravitatoria negativa que hace repulsión hacia la materia y ocasiona que la expansión se acelere más. Los científicos llamaron a esta la “energía oscura” porque es una energía invisible. No se sabe a ciencia cierta qué es esta “energía oscura”, solo se sabe que está venciendo a la fuerza de atracción gravitacional, ocasionando que todo se aleje. En años recientes, y gracias a este hecho, se formuló una nueva hipótesis que es la del “Big Rip”, que dice que dentro de muchos millones de años, la aceleración de la materia va a ser tan grande que las galaxias se desintegraran, sistemas solares, planetas y demás se desprenderán hasta ser átomos individuales, y finalmente estos átomos se desfragmentarán hasta que no quede nada.
El artículo original lo pueden encontrar dando click aquí. Se los recomiendo mucho, el señor Régules es un importante físico e incluso tiene un libro que seguro les interesaría leer.
¿Qué se necesita para ser un estudiante independiente? Tener un aprendizaje autónomo, por supuesto. Y para conseguirlo, en el mapa mental hay algunos puntos esenciales de lo que se debe hacer.
Soy estudiante de ingeniería biomédica, pero recientemente aspiro a estudiar en simultáneo ingeniería en biotecnología por medio de un sistema de enseñanza abierto y a distancia. Es algo nuevo para mí, que he sido estudiante de aula toda mi corta vida. Sin embargo, empiezo a adaptarme, y como primera tarea del curso propedeutico he hecho este resumen sobre qué es ser un estudiante por internet.
El internet ha abierto numerosas puertas a las posibilidades para el aprendizaje. Ya no se depende de una sola fuente de información a comparación de años atrás en los que la biblioteca era la única opción para recopilar datos acerca de algún tema. Ahora hay todo una autopista de conocimientos provenientes de todo el mundo, y no solo es información de libros, sino investigaciones directas de científicos, profesores y demás, con información actualizada.
Al igual que las fuentes de información han crecido, también lo han hecho los métodos de enseñanza, y hoy en día se dispone de sistemas de aprendizaje en línea en los que maestros y alumnos interactúan por medio del internet en un ambiente virtual, facilitando la educación abierta y a distancia. Esto no es algo nuevo, pues muchos años atrás ya existían formas de tomar cursos a larga distancia. Empezó con los cursos por correspondencia, en los que la persona recibía cartas con información en hojas impresas, y era limitante al no tener ningún otro asesor más que aquellas hojas. Después llegó la era multimedia. Al alumno le llegaba un paquete con casetes de «VHS», materiales impresos y demás para una interacción audiovisual que igualmente era complementada con asesoría telefónica. La llegada de la «telemática» marca otro avance en este sistema, pues ahora los paquetes también incluían CD-ROM para material didáctico en las computadoras y se complementaba con el uso de la llamada «ofimática».
En la actualidad, y gracias al internet, existen plataformas virtuales de enseñanza, foros, blogs, correo electrónico, y esto, sumado a los distintos softwares que existen para apoyo, el alumno tiene un rol más activo y didáctico en los sistemas de aprendizaje abiertos y a distancia. La diferencia de estos sistemas con el tradicional «modelo presencial» es que el alumno se vuelve un ente independiente, autogestor de su tiempo y de sus métodos de aprendizaje, y no está todo el tiempo arraigado a un profesor. Tampoco quiere decir que la enseñanza a distancia sea mejor que la presencial y viceversa, pues ambas tienen ventajas y desventajas. Sin embargo, contrario a lo que muchos piensan, la enseñanza a distancia y, en este caso, por internet, es tan eficiente como lo puede ser un sistema presencial.
Hay muchas cosas que un alumno debe tener en cuenta y características que debe poseer si es que piensa intentar un aprendizaje a distancia:
• Debe ser proactivo, siempre responsable de su propio aprendizaje.
• Comprometido con su aprendizaje.
• Debe estar consciente de sus aptitudes para emplearlas correctamente, y también de sus debilidades para fortalecerlas.
• Es importante que esté abierto a la interacción con otras personas, pues no hay que olvidar que el internet también es un medio social, y debe tener disposición para el trabajo colaborativo.
• Tener metas claras y bien planteadas también es de gran ayuda.
• Aprender y retroalimentarse por métodos propios es muy importante.
Igualmente, pueden presentarse algunas dificultades, como el hecho de no estar acostumbrado a no tener un profesor «a la mano» que esté para decir lo que se tiene que hacer. Hay que evitar memorizar la información que se obtenga, más bien analizarla y entenderla; de igual forma, tener consciencia de que el aprendizaje no es una competencia, y en este entorno es más un trabajo colaborativo. Un alumno tiene que aprender a gestionar su tiempo para las actividades en línea, así como adquirir «habilidades comunicativas» para poder interactuar con sus compañeros en internet.
Muy importante es que la persona sea un «alfabeta digital», esto es, una persona que sepa identificar la información fidedigna que se pueda encontrar en internet, que sepa en dónde y cómo buscar esa información y que no se limite a «Wikipedia, Rincón del Vago, buenastareas.com» etc. (lo mismo que con las investigaciones en la enseñanza presencial).
Se dice que los «cursos en línea» son fáciles de llevar e incluso de aprobar. Lo cierto es que en un sistema de aprendizaje en línea eso depende de cómo se autogestione el alumno y cuánto piense esforzarse. Hay que recordar que un «copy-paste» no es lo mismo que un resumen hecho con las propias palabras del alumno. Así que, ¿qué tanto se puede aprender en línea? Eso depende de uno mismo, y por ello es importante tener las características necesarias para ser un buen estudiante, y no un alumno más.
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